Josep Borrero Homs, responsable del Hostal Casa Jacinto: “Somos como una gran familia”

El polígono Mugazuri de Burlada amaneció este jueves con olor a humo. Durante la mañana bomberos, policías y técnicos entraban y salían de la zona para evaluar la situación. El incendio del miércoles dejó la cubierta del hipermercado asiático completamente abierta y corroída en el suelo. Los comercios aledaños no sufrieron mayores consecuencias, a excepción del concesionario low cost de la izquierda, que tiene aberturas en las esquinas del techo más cercanas al Híper Sol. Sin embargo, no fue un día de actividad cotidiana en el lugar: el concesionario y el bazar contiguos al local incendiado estaban cerrados y en el resto de talleres y concesionarios, el trabajo se mezclaba con la expectación por el trajín en torno al híper, la presencia de medios y curiosos y el visionado de vídeos grabados con el móvil durante las llamas.

El hijo del matrimonio dueño del Híper Sol, Gu Shen, regresó durante la mañana para reunirse con el perito del seguro y conversar sobre las soluciones futuras para el hipermercado. Se limitó a expresar que “poco a poco” volverían a la normalidad que tenían hasta las tres de la tarde del miércoles.

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La familia es muy estimada por los comercios vecinos. “Ha sido una gran pena”, comentó Josep Borrero Homs, responsable del Hostal Casa Jacinto, ubicado en la esquina de la calle. Cuando el incendio comenzó, Borrero se encontraba en el hostal y fue testigo de la ayuda comunitaria que recibió Gu Shen y sus padres: “Estaba toda la familia. Al poco rato de empezar el incendio vinieron amigos y familiares a estar con ellos y apoyarles”. Él mismo brindó su ayuda a la madre y le ofreció una habitación para descansar. “Tenía ataques de ansiedad continuos, uno tras otro. Daba gran pena verlo”, declaró sobre la madre, que tuvo que ser atendida por los servicios sanitarios.

Borrero temía que este acontecimiento afectara a la clientela de su local durante estos días, pero un sentimiento predominaba por encima de estas consideraciones. “En esta zona, somos como una gran familia, nos conocemos todos. Es por eso que todos nos sentimos afectados”.