SKF Tudela ya regenera 25.000 litros de aceite para su uso indefinido
Un sistema patentado por la multinacional sueca que fue instalado en la fábrica navarra hace año y medio permite recuperar la calidad de los lubricantes usados como si fueran nuevos
- Carlos Lipúzcoa
Los aceites industriales resultan indispensables para el funcionamiento de las máquinas con las que se fabrican todo tipo de productos. Estos productos lubricantes son irreemplazables ya que reducen los rozamientos internos y evitan un desgaste prematuro de una maquinaria muy costosa, pero, al mismo tiempo, son productos que es necesario cambiar periódicamente y difícilmente se podían reciclar. Hasta la fecha, estos aceites industriales usados se almacenaban para ser posteriormente quemados y solo una pequeña parte se reutilizaba para hacer asfalto o para la fabricación de nuevos aceites industriales.
A ello habría que sumar que, en plena apuesta europea por la economía verde, la síntesis y el refinado de un metro cúbico de aceite industrial supone la emisión de tres toneladas de CO2, uno de los principales gases causantes del calentamiento global y el cambio climático. Sin embargo, ya es posible darle la vuelta a la tortilla gracias a una nueva tecnología patentada por la multinacional sueca SKF, fabricante de rodamientos, sellos y transmisiones, que ya ha incorporado a su planta de Tudela. Se trata de un sistema de purificación de los aceites industriales con el que, según asegura esta empresa, permite el uso indefinido de estas sustancias sin que pierdan sus propiedades. Hay que tener en cuenta que la capacidad lubricante de los aceites industriales se va degradando debido a la acumulación de partículas metálicas, hollín, restos orgánicos, agua y otras sustancias. A esta contaminación se suma la oxidación propiciada por las partículas metálicas, que actúan como catalizador, y el agotamiento de sus aditivos.
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Para alargar la vida útil de los aceites, viene siendo habitual recurrir a filtros que eliminan las partículas de mayor tamaño, pero estos no son eficaces con aquellas otras que pueden ser unmillón de veces más pequeñas que un milímetro. La acumulación de estas últimas, que favorecen la oxidación, es la que acababa provocando la necesidad de cambiar todo el aceite.
La tecnología Double Separation Technology (DST), patentada por SKF, utiliza tanto reacciones químicas como filtrado mecánico para eliminar no solo las impurezas grandes, sino también las más pequeñas. Para ello, al sistema de lubricación de la fábrica se le añade unos depósitos de decantación en los que, en función de los residuos que contiene el lubricante, se somete a una determinada temperatura al tiempo que se agita para mezclarlo con un agente químico que atrae las partículas que se agrupan formando grumos cada vez mayores. Esos grumos se van depositando en el inferior de los depósitos, desde donde pueden extraerse a través de una válvula situada en la base. El aceite depurado pasa después por unos filtros mecánicos antes de añadirle nuevos aditivos para volver a ser reutilizados en un ciclo sin fin.
Gracias a la tecnología DST, SKF asegura que es posible purificar el aceite usado para hacerlo tan efectivo como si fuera nuevo. Ello no solo contribuye a un ahorro en la compra de este producto, sino que también evita tener que parar las máquinas para su sustitución y recorta también tiempo y dinero en los procesos productivos. El sistema de SKF permite además, gracias al continuo filtrado del aceite, mantenerlo siempre en condiciones óptimas, lo que evita la montaña rusa que sufrían los lubricantes en su ciclo de sustitución y degradación.
El sistema diseñado por la multinacional sueca es modular, de forma que se puede dimensionar a las necesidades de cada fábrica. Para aquellos casos en los que no compense la inversión, debido a un menor uso de aceites industriales, SKF Tudela está levantando una planta de tratamiento de aceite industrial con capacidad de procesar entre 6.000 y 8.000 toneladas al año de aceite usado procedente de terceros. Para ello está invirtiendo tres millones de euros en unas instalaciones anexas a la actual fábrica y donde esperan reciclar el aceite de empresas situadas tanto en Navarra como en las regiones limítrofes.
Según explican desde la planta de la capital ribera, hay empresas en Suecia empleando este sistema que ya se han ahorrado treinta cambios de aceite, con el consiguiente ahorro. En el caso de SKF Tudela, ha dejado de comprar 25.000 litros de aceite industrial al año, lo que suponía un gasto de unos 440.000 euros e implicaba emitir a la atmósfera unas 75 toneladas de CO2. Esta empresa ribera se mantiene en contacto con diversas organizaciones empresariales como la Asociación Clúster de Automoción de Navarra (ACAN), la Asociación de la Industria de Navarra (AIN) o la Asociación de Empresarios de la Ribera (AER) para dar a conocer los beneficios de este sistema de economía circular.
Será a partir de la semana 19 de este año, la que comienza el próximo 9 de mayo, cuando empiecen a funcionar las instalaciones que permiten a SKF regenerar el aceite industrial de terceras empresas, en las que se han invertido tres millones de euros. Desde esta empresas de la capital ribera informan que ya cuentan con varios los clientes que enviarán sus lubricantes usados para su purificación.
Los aceites industriales resultan indispensables para el funcionamiento de las máquinas con las que se fabrican todo tipo de productos. Estos productos lubricantes son irreemplazables ya que reducen los rozamientos internos y evitan un desgaste prema
Diario de Navarra
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