Volkswagen Navarra logra piezas in extremis y solo tendrá que parar el próximo lunes

Volkswagen Navarra acaba de notificar al comité que finalmente la fábrica podrá trabajar de martes a viernes al asegurarse el suministro de componentes y solo será necesario cerrar el lunes. Mejoran así las perspectivas de la planta de Landaben, que el pasado martes preveía la necesidad de detener la producción toda la semana que viene por la falta de existencias de columnas de dirección, a lo que se sumaba la situación crítica de pantallas para la radio y centralitas para los airbags.

Tal como se adelantó el pasado martes, este parón se articulará mediante un día de jornada industrial (laborable sin producción). Pese a las buenas noticias, tanto empresa como la mayoría sindical se están planteando prorrogar el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) a la segunda mitad de este año ante la evidencia de que la situación de la cadena de suministros está lejos de normalizarse.

La incertidumbre provocada por la inseguridad en el suministro de determinadas piezas y componentes ha provocado que la planta de Landaben haya tenido que parar este año seis días, cinco de ellos por la escasez de microchips (24, 27 y 28 de enero y 27 y 30 de mayo) y otro más por la huelga del transporte (21 de marzo). No obstante, las previsiones iniciales de los responsables de la fábrica eran que, a estas alturas del año, la cadena hubiese tenido que detenerse doce días, por lo que la situación era mejor de lo esperado. Sin embargo, esta buena racha se ve truncada ahora por la situación de los puertos en China, en especial el de Shanghai, donde la falta de personal por el confinamiento durante dos meses por la covid ha provocado un monumental atasco de barcos y mercancías.

Por el momento, la empresa no ha recortado sus previsiones de producción para este año, que se sitúan en 304.664 unidades. Por cada día de cierre de la fábrica se dejan de producir 1.438 coches, por lo que será necesario recuperar los coches que se han dejado de ensamblar. La factoría ya acumula 8.628 vehículos menos de lo programado a estas alturas por las seis jornadas que no se ha podido trabajar hasta la fecha, a lo que habría que sumar otros 1.438 por el cierre del próximo lunes. La relativa mejoría en el suministro de semiconductores a lo largo de los últimos meses, que se esperaba que volviera a la normalidad en la segunda mitad del año, se ha topado ahora con el aumento de los contagios de covid en China. Las únicas buenas noticias son que la ciudad de Shanghai ha dado por terminado el confinamiento, aunque todavía queda mucho trabajo por delante para recuperar el tiempo perdido.

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