Forem entra en concurso y sus 33 empleados cobrarán del Fogasa

La desaparición de Forem, la fundación creada por CC OO para formar y orientar a trabajadores, ya está decidida, según comunicó oficialmente ayer el patronato que la supervisa. El pasado miércoles se formalizó ante el Juzgado de lo Mercantil la declaración de concurso de acreedores, un trámite que terminará con su liquidación y el despido de sus 33 empleados, cuyos salarios e indemnizaciones correrán a cargo del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) tal como confirmó un portavoz del patronato. La decisión llega ante “la imposibilidad de superar su déficit económico”, situación provocada “en gran medida” por “las políticas del Gobierno de Navarra de tirar los precios de la formación y la orientación”.

El cierre de Forem se produce, según su patronato, como consecuencia “de una serie de circunstancias que han dificultado la gestión de la entidad y, finalmente, su viabilidad”. Entre esas circunstancias, el patronato reconoce algunos errores propios, como el retraso en decidir el cierre o la sobredimensión de la plantilla, aunque culpaba principalmente a la introducción de la libre concurrencia en la oferta formativa, tras una modificación legal auspiciada por el Gobierno del PP, así como al empeño del Ejecutivo foral por acabar con los convenios nominativos con UGT, CC OO y CEN para satisfacer las demandas de ELA y LAB.

La principal queja de Forem se centra en la falta de alternativa al anterior modelo de formación y orientación, que tras ser desmantelado ha dejado un panorama que ha favorecido la proliferación de empresas con malas condiciones de trabajo. Según el patronato, las licitaciones “a bajo coste” han fomentado la aparición de actores ajenos a la formación y la orientación de laboral que no han tenido reparo “en abonar salarios de 600 euros”, lo que ha traído como consecuencia “una fuerte precarización de las condiciones de trabajo”. Frente a estas prácticas, los responsables de la fundación defendían que Forem aplicaba un modelo “basado en la calidad tanto de los servicios que presta como de los contratos de su plantilla” con “unas condiciones laborales decentes”.

Y a la caída de precios por la fuerte competencia se han sumado los largos periodos de inactividad como consecuencia de los plazos de resolución de las diferentes convocatorias que se alargaban “de forma excesiva” y de los “retrasos exagerados” en los pagos, lo que había convertido a Forem en financiador del Gobierno de Navarra y descuadrado sus cuentas.

Indemnizaciones y Anafe

Los 33 trabajadores que desempeñaban funciones administrativas y organizativas continúan vinculados a Forem, cuyos salarios se han seguido abonando hasta la fecha, según un portavoz del patronato, aunque no así sus cotizaciones a la Seguridad Social. No obstante, esta misma fuente reconocía que las nóminas también iban a dejar de pagarse a partir de ahora por la falta de fondos de la fundación. Por tanto, será el Fogasa el que se haga cargo de las últimas nóminas y las indemnizaciones. Según la normativa actual, podrán recibir un máximo de 6.592 euros por salarios y 20.053 euros de indemnización.

Caso aparte es el de los alrededor de 15 docentes que impartían los cursos y que eran contratados en condición de autónomos. Según denunciaron hace unas semanas, no han cobrado por sus servicios desde el pasado mayo, por lo acumulaban facturas pendientes que oscilaban entre los 1.000 y los 10.000 euros.

Por el momento se desconoce la situación en la que se encuentra Anafe, la otra fundación vinculada a CC OO y que se encarga de la integración de los inmigrantes, cuyas finanzas también atraviesan dificultades. Hoy está prevista una reunión de su patronato que analizará su viabilidad y después se encontrará con la representación social de sus 24 empleados.