Loading...

Las pequeñas localidades de Tierra Estella levantan también el telón

En Abárzuza, Baquedano y Muniáin se consolidan grupos que se unen a otros más veteranos de Larrión y Mañeru

Fotos de los grupos de teatro de Tierra Estella Montxo A.G.

El teatro sigue sumando en Tierra Estella. Pequeñas localidades levantan el telón con proyectos jóvenes pero que se consolidan en Abárzuza, Baquedano (Améscoa Baja) y Muniáin de la Solana. Siguen a otros como Trapalán, en Mañeru, y El escondite, en Larrión (Allín), con una trayectoria más dilatada en poblaciones por debajo del medio millar de vecinos que dejan atrás una primavera de representaciones en distintos escenarios de la merindad.

Guardan sus historias mucho en común. Una oferta amateur que logra calidad de la mano de referentes de la escena en la zona como Pedro Echávarri y Marta Juániz. A la vez, estrecha lazos entre sus vecinos mediante iniciativas que, entre ensayos y funciones, abarcan buena parte del año.

<div class="tit_blue">

Abárzuza | El grupo que nace con un aniversario</div> Si algo ha dejado claro la experiencia en Abárzuza es que el teatro no entiende de edades y puede ilusionar a niños y a veteranos como María Luisa Idiazábal, la mayor, a sus 77 años, del grupo El Chaparral. Surgido en 2015 cuando la localidad se movilizó para preparar un espectáculo conmemorativo del 25 aniversario de Anberria, su veterana charanga, se ha consolidado desde entonces.

Uno de sus integrantes, Víctor Pascual Miranda, se remonta a ese 2015 y explica que prepararon la representación del aniversario coordinados por el estellés Pedro Echávarri, de Kilkarrak, que dirige El Chaparral desde entonces. Laura Urtasun Idiazábal, presidenta de Anberria y parte también del grupo, añade que el proyecto tomó forma con un taller de teatro y la obra Todo para el alma todo para el cuerpo, un sainete del dramaturgo José Cedena que dirigió igualmente Echávarri. “El primer estreno contó con 100 espectadores en cada uno de los pases que representamos y ese lleno nos dejó muy buen sabor de boca”, relatan sobre una obra que se escenificó después en Oteiza.

El Chaparral amplió luego registro con La verdadera y singular historia de la princesa y el dragón, un cuento infantil en un grupo al que se habían sumado numerosos chavales del pueblo. “Estrenamos en abril de 2018 y con mucho éxito. Representamos luego en Oteiza y Arróniz y ya el 29 de diciembre en el teatro de Navidad de Estella, con más de 400 espectadores”.  A partir de ahí, un pequeño descanso para trabajar ahora en su siguiente montaje en un momento en el que el grupo aglutina a 20 personas. “Durante el invierno, los ensayos de los viernes son una actividad más de las que se programan y lo que te recompensa es que la gente ha acogido muy bien el proyecto y nuestras representaciones. Son también actuaciones asequibles porque no tenemos afán de lucro y entre los grupos pequeños de la zona nos apoyamos”, señala Víctor Pascual. Poco a poco, con el dinero de las entradas van haciéndose con los focos y un equipo de sonido para sus montajes.

 

<div class="tit_blue">Baquedano | La iniciativa de dos de sus vecinas

 </div> En el caso de Baquedano, concejo de Améscoa Baja, Atastalde nace hace tres años. Dos de sus vecinas,Beatriz San Martín Otxoa y Rakel Legarda Ibarguren, contactaron con la actriz estellesa Marta Juániz para plantearle poner en marcha un taller que está en el germen del grupo actual. “Lo que hacemos desde entonces es un montaje para fiestas de Baquedano en septiembre. Entre todos, planteamos aquello que nos puede apetecer y tomamos la decisión con la idea de pasarlo bien también durante el proceso y de que el público lo disfrute”, cuenta Marta Juániz.

El resultado, añade, “un grupo fantástico que oscila entre las 12, 13 y 14 personas” que costó en principio sacar adelante porque no había precedente de teatro en el concejo. Las representaciones han puesto con éxito el colofón a las fiestas y proporcionado también en los fines de semana en que hay ensayo -dos al mes habitualmente el sábado por la tarde- una alternativa a los días de invierno.

En estos momentos, el grupo trabaja con su tercer espectáculo. Un relato que demuestra como en la vida la realidad supera muchas veces la ficción y que permite por su estructura ensayar en escenas independientes, algo muy práctico para cuando la agenda complica reunir a todos al mismo tiempo. Aunque con un guión suyo y con la colaboración de Miguel Munárriz, Marta Juániz explica que Cuestiones peligrosas, como se titula la apuesta de este año, tiene un punto de creación colectiva. “A veces no resulta fácil mantener el interés de la gente a lo largo del tiempo porque al final de lo que se trata es de compartir este espíritu entre todos, de dedicar un sábado por la tarde a pasar un buen rato y a aprender unos de otros. Año a año, hemos ido evolucionando, cambiando y eso es muy satisfactorio para ellos y para mí”, relata la intérprete estellesa. Para el montaje de ese primer fin de semana de septiembre, como en los anteriores, tienen previsto empezar con una canción. “Nos divierte mucho hacerlo así, con una pequeña coreografía. Para llegar a Eurovisión no estamos, pero es una buena manera de empezar y poner fin a la función”, señala.

 

<div class="tit_blue">Muniáin |  Con la vista puesta en sus fiestas</div>

En una actividad que le lleva a compaginar sus proyectos profesionales con la dirección de estos pequeños grupos de teatro que se abren paso en la merindad, Muniáin de la Solana constituye otro ejemplo. La también actriz estellesa Inés Bengoa dirigió en este pueblo en su día un grupo cuya coordinación asume ahora Marta Juániz. .

El grupo La Matraka ensaya un día a la semana, los martes por la tarde, con la vista puesta en representar una función durante las fiestas patronales de agosto. Lo harán así en Muniáin y también en Aberin. “Por el momento, ese es nuestro objetivo. Disfrutar con ello y dar opciones para el periodo de invierno en estos pueblos”, subraya.

El teatro sigue sumando en Tierra Estella. Pequeñas localidades levantan el telón con proyectos jóvenes pero que se consolidan en Abárzuza, Baquedano (Améscoa Baja) y Muniáin de la Solana. Siguen a otros como Trapalán, en Mañeru, y El escondite, en L

Para leer este contenido exclusivo, debes tener una suscripción en
Diario de Navarra
Tipos de suscripción:
  • Web + app (0,27€ al día)
  • Versión PDF
  • Periódico en papel
Mereces información de calidad, sin límites