Amargo robo de golosinas en Villava

Apenas faltaban diez minutos para las cuatro de la mañana cuando el teléfono de Cristian, propietario de una tienda de chucherías en Villava, le despertó de su placido sueño. Desde el otro lado del hilo telefónico, un agente de la Policía Municipal de Villava le comunicaba que tres personas acababan de entrar en su tienda y que se habían llevado la caja registradora. La buena noticia era que al menos dos de ellos habían sido detenidos inmediatamente y que habían recuperado la máquina.

CÁMARA DE VÍDEO

Cristian se personó rápidamente en el negocio y visionó junto a los agentes las imágenes de la cámara de seguridad. En ellas se veía a un individuo entrando a cuatro patas en la tienda y sustrayendo la registradora. La secuencia apenas duró 30 segundos.

Pero lo que casi parecía un robo de “entrar y salir” se les complicó a los delincuentes. A escasos diez metros de la tienda se encuentra el ayuntamiento de la localidad con la base de la Policía Municipal en su interior. El ruido que hicieron al entrar en la tienda y e que habían hecho antes tratando de entrar a un bar anejo, alertó a los agentes que apenas tardaron unos segundos en emprender la persecución.

Los tres implicados comenzaron la huida. El que penetró en la tienda tiró la registradora y huyó a pie perseguido por un agente; otro lo hizo en bicicleta en dirección a Burlada; el tercero, en patinete, cara a Huarte. Un coche patrulla inició una breve persecución del individuo que huía en patinete, que fue detenido por los agentes. Afirmó ante ellos que era menor de edad y residente en Sarriguren. Estos habían solicitado apoyo a otros cuerpos para detener a los sospechosos. De este modo, el que huyó a pie fue detenido poco después por una patrulla de la Policía Municipal de Ansoain que se había acercado al vecino Polígono de Landazábal para participar en la búsqueda.

MOCHILA CON UN HACHA

Tras visionar las imágenes del robo, los agentes se dieron cuenta de que uno de los sospechosos llevaba una mochila que no tenía en el momento de su detención. Inspeccionando la zona, la encontraron en el patio de un chalé y dentro de ella hallaron un hacha de grandes dimensiones, unos alicates, tres bolsas de basura y unos guantes de lana que pudieron utilizarse en el robo.