Una riada histórica aísla Burlada y deja pequeña la gran inundación de 2013 en Villava
Graves daños en Ezkabarte y la crecida del Ulzama aísla núcleos como Azoz
- Cristina Aguinaga
Desbordados. La fuerza del Arga, cuya crecida ha doblado la previsión inicialmente prevista (se calculaba un caudal de 256 metros cúbicos y ha sobrepasado los 510) ha irrumpido con fuerza en el casco urbano y, a pesar de que se han retirado vehículos, la fuerza del agua a media mañana aislaba prácticamente Burlada. Hasta esta localidad es imposible llegar (cortados accesos desde Beloso, Areta o Villava) y el agua ocupa todas las instalaciones deportivas del Soto, afectando a viviendas y garajes y alcanzando hasta la calle Mayor.
En Villava, desde las 2.40h que se salió el río, el municipio ha pasado la noche en vela y a la espera de la valoración de daños la impresión es que la riada va a dejar pequeña la gran inundación de junio de 2013. En la ikastola Paz de Ziganda también ha entrado agua. Por su parte, en la urbanización Martiket, entre Villava y Huarte, algunos chalés tienen hasta un metro de agua y los bomberos han tenido que desalojar en lanchas a una veintena de vecinos. El agua ha inundado también el cementerio municipal de Villava.
Por su parte, la crecida del Ultzama afecta gravemente a todo Ezkabarte, aislando núcleos como Azoz (se accede cruzando un puente inundado por el río) y anegando el polígono de Arre y toda la zona de la playa de Oricáin.
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