Los alumnos navarros finalizan este jueves la EvAU con un verano sin restricciones en el horizonte
Los alumnos navarros de 2º de Bachillerato finalizan este viernes las pruebas de acceso a la universidad y se disponen a afrontar un verano con viajes, la covid casi olvidada y el ansia mayoritaria de disfrutar. Aunque hay quienes prevén también trabajar
- M.Barriga / A.Briceño
Sonrisas y suspiros de alivio. La convocatoria anual de la EvAU, iniciada el pasado martes, finaliza este jueves después de tres días en los que más de 3.700 alumnos navarros se han enfrentado a los ejercicios de las diferentes asignaturas: Lengua Castellana y Literatura II, Historia de España, Inglés, Matemáticas…
Después de superar los exámenes, los estudiantes cierran el ciclo de Bachillerato y comienzan una nueva etapa después de un curso difícil. Las largas jornadas de pruebas no han quitado la ilusión a unos jóvenes ansiosos de disfrutar de un verano sin ningún tipo de limitación sanitaria por la pandemia. Un motivo más para festejar el fin de curso.
UN VERANO COMO ANTES
El levantamiento de las restricciones ha permitido, por ejemplo, que los estudiantes puedan realizar el tradicional viaje a Salou sin ningún tipo de ataduras. Un viaje que, por cierto, el año pasado muchos ya llevaron a cabo, aunque fue el origen de un extendido brote de coronavirus que se trasladó a Pamplona.
Pese a todo, entre los jóvenes prima las ganas de disfrutar de las costas catalanas. Chloé Vera, del Colegio Liceo Monjardín, lo tenía claro este miércoles: “Todas tenemos un viaje con nuestras amigas a la playa, con el sol, para salir de fiesta”. Muchos ya han hecho sus reservas para después de exámenes y piensan disfrutar de la playa de la que Pamplona carece. Su compañera, Teresa Tabuenca, coincidía con Vera y añadía como objetivos de su verano sacarse el carné de conducir e ingresar en la universidad.
Luis Goñi, del Colegio Hijas de Jesús, también tiene fiestas de su pueblo, Berriosuso, este fin de semana y quiere disfrutar a lo grande gracias a la relajación plena de las restricciones. Es así como, además de Berriosuso, Pamplona se prepara para el regreso de San Fermín, y los estudiantes lo sienten desde ahora. Después de Salou, la semana del 7 de julio es el evento más esperado de la temporada. Entre sus respuestas, los estudiantes expresaron su emoción por el retorno de los pañuelos rojos por las calles de Pamplona, incluso Miriam Martín, del IES Mendillorri, soltó un “por fin”.
Pero hay alumnos que también tienen la agenda ajustada con otras actividades más allá de la playa o las fiestas. “Yo en agosto trabajo. Y en Sanfermines también curro”, comentó el propio Luis Goñi, que trabajará con su padre. Del mismo colegio que él, Lucas Fleitas va a trabajar en una empresa de ventanas en agosto. Los jóvenes planean mantener un equilibrio entre la diversión y las responsabilidades. Aunque siempre hay alguno, como Aritz Iriarte, que se decanta: “Yo no voy a trabajar. Voy a disfrutar”.
PLANES DE FUTURO
Alguno de los alumnos ya han celebrado la graduación de final de curso. “La celebramos en mayo, todo normal. Los chicos están deseando volver a la antigua normalidad”, explicó Teresa Sanz, profesora de Matemáticas del Colegio Hijas de Jesús. Además, los viajes que habían sido cancelados por la pandemia también se irán reanudando poco a poco: “Es una pena que no hayamos podido realizar el viaje de estudios, pero los retomaremos en septiembre. Yo creo que la normalidad ya vuelve”, determinaba.
La profesora hizo un balance general positivo de la convocatoria: “Hay nervios como siempre, pero llevamos repasando desde hace dos semanas”. También recalcó que los alumnos necesitan cada vez notas de acceso más elevadas, aunque el modelo de examen, con opciones, ha facilitado la posibilidad de elegir a los estudiantes.
Los jóvenes ya tienen sus vacaciones planeadas, pero no dejan de lado su futuro académico. Algunos lo tienen muy claro. “Me gustaría estudiar Relaciones Laborales y Recursos Humanos”, afirmó Silvia Aranguren, del Colegio Liceo Monjardín.
Su carrera depende del rendimiento en las pruebas. Miriam Martín, del IES Mendillorri, y su amiga Daniela Fasciglione, de la Escuela de Artes, entraron a los exámenes con sensaciones distintas. Fasciglione quiere estudiar Diseño de Moda en Madrid e iba “confiada y tranquila”, mientras que Martín necesitaba una nota alta, por lo que estudió y se esforzó para dar la talla.
Otros tuvieron una sorpresa con alguno de los exámenes, como Alba Suberviola, del IES Tierra Estella, que encontró el de inglés más exigente de lo que esperaba. “Han dicho que ha estado más difícil que otros años”, justificó.
A pesar de los resultados, los jóvenes están dispuestos a disfrutar del verano después de cerrar un ciclo. “Pase lo que pase, tenemos ganas de celebrarlo”, anunciaba Iker Arrarás, del Colegio Hijas de Jesús.
Sonrisas y suspiros de alivio. La convocatoria anual de la EvAU, iniciada el pasado martes, finaliza este jueves después de tres días en los que más de 3.700 alumnos navarros se han enfrentado a los ejercicios de las diferentes asignaturas: Lengua Ca
Diario de Navarra
- Web + app (0,27€ al día)
- Versión PDF
- Periódico en papel