El Gobierno foral destina 5 millones a rehabilitar VPO de alquiler

El Gobierno de Navarra invertirá cinco millones de euros para rehabilitar el parque de viviendas públicas destinadas al alquiler, empezando por los edificios más antiguos y deteriorados que se localizan en el barrio pamplonés de la Rochapea y las localidades de Barañáin y Burlada.

En estos inmuebles, ha dicho en conferencia de prensa el vicepresidente Miguel Laparra, se llevará a cabo una reforma integral de los edificios, con envolventes térmicas según la certificación energética Passivhaus, renovación de infraestructuras y redes de calefacción e introducción de biomasa como fuente de energía renovable. alternativa al gas.

Son en total 87 viviendas distribuidas en 7 portales cuyos concurso para licitar las obras de rehabilitación ya se ha publicado en le portal de contratación del Gobierno una vez estudiado su estado y redactados los proyectos arquitectónicos.

De las 87 viviendas, 20 están en la calle Cruz de Barcacio de la Rochapea y el coste de licitación máximo es de 711.496 euros; otras 38 se localizan en la Plaza Ezkabazabal de Burlada, y su presupuesto es de 2,3 millones; y las otras 29 están ubicadas en la plaza Río Arga de Barañáin y el coste es de 1,15 millones.

De esta forma el montante máximo de licitación asciende a 4,2 millones de euros a los que se deben añadir los gastos por los proyectos arquitectónicos, licencias e IVA, por lo que la inversión final que asumirá la sociedad pública Nasuvinsa superará los cinco millones de euros.

Laparra ha indicado que las ofertas se deberán presentar antes del 12 de abril, se resolverán en uno o dos meses y la duración de las obras será de ocho meses en el caso de Burlada y de siete en Rochapea y Barañain.

El Gobierno de Navarra gestiona en la actualidad el arrendamiento de 1.145 viviendas de su patrimonio, a las que se suman las 656 de la bolsa de pisos particulares cuyos propietarios ceden su alquiler al Gobierno.

Estas primera rehabilitaciones se corresponden con edificios que superan ya los 30 años de antigüedad y que requieren una remodelación importante dado su estado de deterioro, pero el objetivo es extender estas actuaciones a otros edificios, según su antigüedad y el estado de las viviendas.

"Más allá de la necesidad de aumentar el parque de vivienda social, esta línea trata de postar por la calidad y por mejorar la eficiencia energética", ha subrayado Laparra.