El Parejas se rompe por abajo

La novena jornada, con cinco puntos aún en juego, ha marcado la primera ruptura del Parejas. Y ha sido por debajo. Después de nueve oportunidades para puntuar, Jaka-Aranguren cosechan una sola victoria, después de caer ayer ante Peña II-Eskiroz, suplente de Jon Mariezkurrena por problemas en su derecha, por 15-22. Fue un partido gris, sin derroche de tantos brillantes, en el que los errores pesaron casi más que los aciertos. 22 tantos de los 37 fueron pelotas perdidas/errores. Una cifra a todas luces excesiva.

Peña II y Jon Mariezkurrena, este domingo con la colaboración del navarro Eskiroz, respiran un poco más tranquilos. Cosecharon un cuarto punto de oro que abre un hueco de dos victorias de margen y de seguridad para jugarse una plaza en el play off. Jaka-Aranguren, que tienen un punto, y Ezkurdia-Martija, con dos, se enfrentan a un final de liguilla muy cuesta arriba en el que ya no tienen margen de error. Tienen que ganar prácticamente todo.

Fue el de Etxeberri un choque espeso, de pico y pala, en el que no hubo brillantez y que fue una pelea tanto por tanto hasta el primer descanso largo. Se registraron media docena de empates.

Ninguna de las dos parejas conseguía imponer su juego. Atrás, donde la mirada estaba puesta en el navarro Iosu Eskiroz, ninguno de los dos zagueros conseguía romper. Es más, el de Markalain siempre estuvo en su sitio -a excepción de dos tantos (el 4-5 y el 6-5 en los que no se entendió con Peña, que se empeñó en ir a por la pelota- y le sujetó bien a Aranguren. Le dio altura a la pelota con las dos manos, y terminó con siete pelotas perdidas. Fríamente muchas, pero menos que el zaguero rival.

MEJOR EN LA PARTE FINAL

Adelante el partido tampoco tuvo un dueño claro. Peña fue, como siempre hacia adelante, con el gancho y la volea como argumentos y un acierto desigual. Jaka siguió en la línea de todo el campeonato, con intermitencias y sin una línea regular en el juego.

En un partido sin demasiado brillo acabaron determinando los errores. Y a los colorados los fallos les pesaron más en la segunda parte del partido, del primer descanso largo en adelante. Pinchó Aranguren en el desenlace con tres errores del 13-18 al final. El pelotazo atrás de Peña del último tanto lo acabó de rematar.

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