Tres destinos para disfrutar del Carnaval 2020 en España

El domingo 23 de febrero es el día en el que se celebra oficialmente el carnaval es España en este 2020. Son muchas las ciudades que alrededor de este día han organizado días de fiesta, actos y celebraciones llenas de colorido y diversión.

En Navarra, el Carnaval de Lantz es el más multitudinario. Una fiesta de carácter tradicional que se celebra los días que preceden al miércoles de Ceniza que este año cae el 26 de febrero. La representación nocturna por las calles del pueblo de la captura del malvado bandido Miel Otxin es el acto principal de esta fiesta, celebrado el martes de carnaval. Los vecinos representando a distintos personajes de leyenda y acompañados por chistus y tamboriles recorren el pueblo bajo la atenta mirada de cientos de visitantes

Cádiz es otra de las localidades que han convertido los carnavales en uno de sus principales reclamos turísticos. Los de este año se celebrarán del 20 de febrero al 1 de marzo. Miles de turistas de todo el mundo disfrutarán de diez días de fiesta en los que la música carnavalesca sonará en cualquier rincón de la ciudad. Los actos comenzarán con el Alumbrado Extraordinario y darán comienzo así a días llenos de concursos, recorridos de coros, cabalgatas, disfraces... La Pestiñada, Erizada, Ostionada y Mejillonada son los actos culinarios principales y más multitudinarios que preceden al Carnaval de Cádiz.

El 24 de enero arrancarán, con una Gala Inaugural, los Carnavales de Santa Cruz de Tenerife, otro de los carnavales españoles que más visitantes recibe. No será hasta el 21 de febrero cuando de comienzo la fiesta en la calle con la Cabalgata Anunciadora.

Según los historiadores el origen de los carnavales se remonta a 5.000 años atrás, en tiempos de los egipcios y sumerios. Aunque fueron los romanos quienes más influyeron en esta fiesta, cuando se divertían durante días en honor a Baco, el dios del vino. En esas fechas las gentes compartían como iguales junto a los esclavos, algo que solo sucedía en esa celebración. Esta costumbre se expandió por Europa y posteriormente por América, casi siempre en países de tradición católica.